lunes, 22 de octubre de 2012

La Tagliatella

Web: http://www.latagliatella.es/esp/mapa-restaurantes.php

 Ubicación:

Categoría: Franquicia Americana (http://www.amrest.eu/)

El Local

Típico local de franquicia ambientado al estilo italiano. Estanterías de cartón piedra con libros titulados en italiano, lamparas grandes de decorado de cine, escaleras de madera para los baños, letreros italianos, etc.

La decoración varía de uno a otro. Hay algunos que merece la pena entrar y echarte unas risas con el exceso de decoración.

Aún así es un sitio agradable.

La Pizza




Si te gustan las pizzas que te secan la boca y que no saben a nada, éste es tu sitio.

Cuando te la sirven piensas "¡Me voy a poner las botas!". Una pizza enorme, un aspecto bastante bueno, pero... algo falla.

Acercas tu nariz a la pizza e intentas inhalar algún tipo de aroma... Nada. Esta pizza no huele a nada. No huele a jamón, la masa no huele, si a caso, un pequeño aroma a queso se mete en las fosas nasales. Insuficiente.

Empiezas a cortar la pizza te vas dando cuenta que vas a necesitar mucho, mucho agua (por cierto que no tienen jarra de agua). Ningún jugo aparece invadiendo el plato y no solo eso, cuando pinchas el borde, está hueco! y estalla en mil pedazos de corteza. No se de qué estará hecha la masa, pero puedo asegurar que todo el borde de la pizza esta hueco, no hay miga.

Después de que el cuchillo atraviese el desierto formado por esta pizza y muerdes el trozo, una gran sensación de nada aparece en tu boca. A ver, entiendo que el estilo de la pizza sea pizza fina pero hay pizzas finas que saben genial, esta por mucho que mastiques sólo te va secando la boca más y más. Me huelo que los americanos quieren que pidas más y más agua y así hacer un buen negocio.

El jamón, como se ve en la foto, un jamón de mala calidad de estos que vienen en lonchas perfectamente cuadradas, no sabe a nada. Tiene un atisbo de sabor pero esta a mil kilóm.. millas (un guiño a nuestros amigos estadounidenses) de saber bien a jamón. Puede ser que esté algo desecado para contribuir al negocio hídrico, ¿quién sabe?

La última decepción, el queso. Para no llevarle la contraria al resto de la pizza, el queso tampoco sabe a nada.

No voy a seguir recordando esta pizza pues la quiero borrar de mi memoria. Sólo una última cosa, la pizza es tan fina que en 2 minutos está fría... por lo menos si pusieran el plato caliente se salvaría algo de sabor, ya que cuanto más fría está menos sabor.

En resumen esta pizza no sabe absolutamente a nada

(Adivinad por qué no he hablado del tomate, ¿será porque no sabe a nada?)

Precio: 11,15 € (10,14 € sin IVA).

Conclusión

No se podía esperar nada mejor de una franquicia controlada por AmRest, responsable de otros establecimientos de calidad (es broma) como Burguer King, Pizza Hut o KFC. Al más puro estilo americano, todo efectos especiales y nada real.

Yo no pagaría más de 5 € por esta pizza. Ingredientes de baja calidad, muy poca cantidad, ¿cuánto les debe costar hacer esta pizza? ¿0,50 €? Probablemente sí.

Si buscas una buena pizza, huye de este lugar.

Con esta pizza el sueño americano se convierte en pesadilla.

Estatus: No volver

domingo, 14 de octubre de 2012

Trattoria Pulcinella


 Ubicación:

Categoría: Restaurante Italiano

El Local

El local tiene una decoración elegante que conjunta perfectamente con la luz tenue y los tonos azules y amarillos. Aunque el espacio esta bastante aprovechado, es decir, muchas mesas apretadas y poco espacio entre ellas, se respeta el límite entre la intimidad de una mesa y la siguiente.

En frente del restaurante principal tienen otro local que prácticamente es otro restaurante. En él los espacios son un poco más amplios y la decoración es muy similar.

El personal es educado, majete y entiende de comida italiana. Y aunque en el ambiente no se aprecien los aromas de la leña, el local cuenta con un horno de leña que hará las delicias de los pizzeros.

La Pizza



Sin duda esta pizza es, a día de hoy, la mejor pizza que se puede tomar en Madrid. Nada más verla en tu mesa se comprueba que además de jamón, queso y salsa de tomate, esta pizza tiene ingrediente extra de tradición.

Antes de nada, acercad vuestras fosas nasales y dejad que los aromas invadan vuestra nariz. Unos aromas mediterráneos, un buen olor a jamón, el aroma de la masa, su textura, su color, todo indica que va a ser una comida memorable.

Al cortar la pizza los jugos y aceites rellenan las grietas producidas por el cuchillo. Unos aceites rojizos que después serán ideales para untar los bordes y prolongar los sabores el máximo posible. Y es que la masa es una masa de 10. Tostada por el fuego de la leña, la masa ofrece el mejor sabor del pan junto con los tonos amargos de la cocción con leña. No es una masa que llene, es ligera pero no hueca, esta tostada pero es mullida y como base para los ingredientes es perfecta.

Lo más importante es que la pizza sabe tal y como huele. Hay pizzas que huelen muy bien pero cuando las pruebas la masa te seca la boca o el tomate es demasiado ácido y se come todo el sabor. Ésta no. No os preocupéis por el agua (aunque tienen jarra) que esta pizza. en vez de secar la boca, la humedece.

El sabor esta extendido de forma uniforme por toda la pizza. Toma un trozo sólo con tomate y notarás queso y jamón como si de magia se tratase. Cada vez que masticas los pedazos de la pizza, multitud de jugos surgen y te empapan la boca con sabores de todo tipo. Lo dulce, lo salado, lo ácido y lo amargo entran en consonancia en tu boca al ritmo de la masticación y sólo piensas en cuál va a ser tu siguiente trozo.

El jamón es perfecto. A mi me gusta el jamón fino y un poco crujiente, pues bien, esta pizza lo tiene con un corte más grueso y para nada crujiente. Me ha sorprendido su sabor y su perfecta mezcla con el resto de sabores de la pizza.

El queso es mozzarella de búfala. Esparcido por la pizza en pegotes su sabor no se limita solo a estas zonas, sino que los jugos de la mozzarella, junto con los del jamón, se extienden durante la cocción y conquistan toda la superficie de la pizza. Así se consigue un sabor a mi juicio perfecto y aunque espero que no (por el bien de la pizza), insuperable.

Sinceramente es un verdadero placer poder masticar esta pizza.

Precio: Alrededor de 10,00 €.

Conclusión

Una pizza de semejante calidad tiene que ser probada por lo menos una vez por todo el mundo. La carga de tradición que lleva la pizza le llegará al corazón (o al estómago) a cualquier persona, sea o no amante de las pizzas. Como dije antes, para mí la mejor de Madrid.

Si estáis pensando ir os recomiendo reservar, ya que es un restaurante muy solicitado por su calidad.

Id y volveréis.

Estatus: Indispensable

viernes, 5 de octubre de 2012

A' Cantinella

 Ubicación:

Categoría: Restaurante Italiano

El Local

Es un local amplio y bastante bien decorado. Oscuro pero iluminado con luz natural de la calle. La verdad que es un sitio agradable y tranquilo. Un buen lugar.

Además, el olor a comida italiana es bastante bueno. Un restaurante italiano que no huela a comida italiana es como un cuerpo sin alma.

La Pizza



Si tuviera que ponerle un adjetivo a esta pizza sería Indiferente. Reconozco que a más de uno, al ver la foto, le empiece a salivar la boca. Pero no os dejéis engañar por este aspecto de pizza de calidad. Nada más alejado de la realidad.

A mi juicio el único punto bueno que tiene es la masa y eso que no es de las mejores que he probado. Cuando masticas la masa durante un rato te empiezas a dar cuenta que el sabor, más que parecerse a pan, se parece a algún tipo de bollería. No sabría decir exactamente a qué bollo, por supuesto no un bollo dulce. No es un sabor que este mal, pero al final te acabas cansando y dejas los bordes.

No se vosotros pero yo, cuando no me divierte una pizza, acabo cerrando el triángulo de pizza como en un sándwich de forma inconsciente. Pienso que debe ser una estrategia del cerebro para acabar antes con la pizza. Pues amigos con esta pizza mi cerebro me ha hecho sandwichear cada trozo.

Y es que es una pizza que carece de sabor. Primero o hay demasiado tomate o falta demasiado queso y además el queso no sabe a nada. Cuando digo nada es nada en toda su definición. Por supuesto que no es mozzarella de búfala pero es que, de todas las mozzarellas de vaca, han cogido la peor o la más barata.

Al tomate le faltan especias. Quiero pensar que simplemente es porque han puesto tomate natural, no un tomate preparado específicamente para pizza. Por esto el tomate carece de sabor y su abundancia en la pizza no hace más que añadir sabor a nada.

El jamón tampoco me supo a nada, además en vez de estar un poco tostado o crujiente estaba muy endeble. Se parecía más a un lacón ahumado. Cuando masticas un buen jamón, el sabor te invade tanto la boca como la pituitaria y los aceites juegan con tus papilas, pero éste era como masticar un pellejo blando sin consistencia.

En definitiva, cuando introducías en tu boca un trozo de esta pizza masticabas decepción e indiferencia y esperabas que fuera porque justo ese trozo, a lo mejor, tenía más tomate y por eso no sabía a nada. Pero esta sensación, para mi desgracia, se repitió hasta el final.

Me gustaría hablar de esta pizza como una pizza de calidad. Pero no es así.

Precio: Alrededor de 9,00 €. (Uf, últimamente se me olvida mirar el precio exacto. Me lo apunto para la próxima)

Conclusión

El local tiene potencial para ser un buen italiano pero sus pizzas dejan mucho que desear. Pienso que lo que ocurre es un conjunto de fatídicos sucesos aislados que unidos culminan en semejante destrozo de sabor. El cocinero no debe saber hacer pizzas, o las hace sin ningún tipo de interés (no hay más que verle hacer las pizzas detrás de la mampara) y por otro lado los dueños, o no han probado las pizzas que hacen o les da igual que no sepa a nada con tal de ahorrar.

Si yo tuviera un restaurante italiano me gustaría que mis pizzas supieran mejor que ninguna. La dejadez de los dueños y los camareros se refleja en el sabor de las pizzas y, por transitividad, en la satisfacción del cliente.

Mi satisfacción fue nula.

Estatus: No volver

martes, 2 de octubre de 2012

Trattoria Il Casone

Ubicación:

Categoría: Restaurante Italiano

El Local

El local tiene una decoración elegante y digna de un italiano de alto nivel. Habitaciones amplias, paredes modernas de ladrillo e iluminación tenue que anima a una cena relajada. Lo único que se echa en falta es el olor a comida.

No esperéis un personal que entienda de comida italiana. Había 3 tipos de pizza con jamón york, yo pedí la pizza prosciutto y me pusieron la pizza prosciutto e funghi. Al decirle al camarero que no era la que había pedido, éste se lo echó en cara a la camarera que me había tomado nota y en vez de aceptarlo empezó a quejarse en alto que no existía la pizza prosciutto.

Conclusión, no contrates camareros que ni siquiera se molestan en ver los platos que se sirven en tu restaurante.

La Pizza


Viendo como iban sucediendo los acontecimientos no me esperaba una pizza de calidad, pero me llevé una buena impresión cuando me la sirvieron. La masa estaba tostada en el punto perfecto y aunque un poco escasa de jamón la verdad que se aprecia que los ingredientes son buenos.

El queso es mozzarella de vaca (y si no lo es me pego un tiro), lo que resta buena parte del sabor que una buena pizza tiene que tener y el tomate la verdad que sabe bien.

Los bocados con jamón no decepcionan, un jamón fino y un pelín crujiente que se mezcla bastante bien con el sabor de la masa y del tomate. El sabor no invade la pituitaria como con otras pizzas, pero te deja bastante satisfecho.

La gran pega es que el sabor se centra casi exclusivamente en los trozos con jamón, y por desgracia, como se puede apreciar en la foto, más o menos el 50% de la pizza está sin jamón. Esto conlleva que los trozos sólo de queso no aportan nada en sí mismos.

Los bordes están buenos. Pero ya. Te puedes comer unos cuantos pero al final acabas aburriéndote y los dejas en un lado del plato.

El gran lastre de esta pizza es el queso y es una pena porque podría ser una pizza mucho más buena y divertida si los dueños utilizaran mozzarella de búfala y un poco más de jamón.

Precio: Alrededor de 9,00 €.

Conclusión

Aunque su aspecto es de un restaurante bueno, no pasa de ser un italiano de barrio con calidad. Su materia prima es buena pero está poco aprovechada. Uniendo a esto el trato y que los camareros no sepan, bien por falta de formación o de interés, qué platos se ofrecen y los ingredientes que llevan, nos queda un italiano pasable y digno de ser una tercera opción ya que por ese precio (o menos) otros ofrecen un servicio, un trato y una calidad mucho mejor.

Si estáis desesperados por comer vuestra pizza prosciutto y no podéis aguantar más, este es vuestro sitio.

Estatus: Pasable